Pese a todo, sigue siendo un depredador del área, como demuestran sus más que aceptables cifras goleadoras (24 goles en 39 partidos). El mal momento de los ‘Red Devils’ le ha penalizado, aunque es evidente que, además, influyen en su rendimiento otros factores como la edad (37 años) o una movilidad cada vez más reducida que limita su radio de acción y área de influencia. A día de hoy, su futuro es una incógnita, a la que no es ajena la compleja situación institucional y deportiva del United, con la llegada de Erik Ten Hag como intento a la desesperada para reflotar al trasatlántico de Old Trafford.